La devoción de San Martín a la oración

San Martín mantuvo su mente y su corazón siempre elevados al Creador de todas las cosas. Su oración venía de lo más profundo de su ser, no sólo de sus labios. Naturalmente se volvió para alabar y dar gracias a Dios, y para pedirle ayuda. San Martín oró con humildad y perseverancia, y Dios respondió a sus oraciones de manera milagrosa. Martín orará por nosotros ante el trono de Dios en el cielo.

Oración: San Martín, ayúdanos a tener una gran fe en la promesa de Cristo: "Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá" (Mt 7,7). Haznos fieles participando en la Santa Misa y dedicando tiempo a la oración personal cada día, para obtener las bendiciones de Dios. Pídele a la Reina del Santísimo Rosario que también interceda por nosotros. Amén.

Recita un Padrenuestro, diez Ave Marías, un Gloria.
San Martín de Porres, ruega por nosotros.

Séptimo Día
Espíritu de Penitencia de San Martín


San Martín fue un gran trabajador que dedicó todas sus energías a su ministerio. No buscaba una vida cómoda y fácil. Aunque trabajaba tan duro, también se imponía severas penitencias por sus pecados y la salvación de los demás. Si un hombre tan santo hizo penitencias, ¡cuánto más nosotros, que hemos ofendido gravemente a Dios por nuestros pecados!

Oración: San Martín, de ti aprendemos a ser dedicados y desinteresados. Tú nos enseñas a evitar la ociosidad y el egoísmo. Danos un poco de ese espíritu de penitencia que tuviste, para que seamos constantes en la lucha contra la tentación. Pídele a Jesús crucificado y a María, la Reina de los Mártires, que nos dé la gracia de luchar la buena batalla. Amén.

Recita un Padrenuestro, diez Ave Marías, un Gloria.
San Martín de Porres, ruega por nosotros.

Octavo Día
Recompensa St Martin's


San Martín tuvo una muerte santa y pacífica. Había pasado su vida haciendo el bien como hermano humilde de la Orden Dominicana. Pero el que se humille será exaltado. Pronto su vida heroica se hizo conocida en todo el mundo, y el 6 de mayo de 1962 el Papa Juan XXIII lo proclamó solemnemente San Martín de Porres. Regocijémonos de tener un intercesor tan poderoso entre los santos de Dios!

Oración: San Martín, que han sido levantados por Dios a cómo nosotros el camino a nuestro verdadero hogar. Usted nos ha dado el buen ejemplo y el aliento que necesitamos. Ahora nos damos cuenta de tu vida que todo lo que tenemos que hacer para ganar la recompensa de la gloria es amar y servir al mejor de los Maestros. Que siempre seamos humildes para que también nosotros seamos exaltados a la vida eterna. Amén.

Recita un Padrenuestro, diez Ave Marías, un Gloria.
San Martín de Porres, ruega por nosotros.

Noveno Día
Milagros de San Martín

San Martín hizo muchos milagros durante su vida y después de su santa muerte. Podemos ir a él con confianza porque él obtendrá nuestras peticiones si son para nuestro verdadero bienestar. Su gran corazón ama ayudarnos en todo sentido. Sólo tenemos que contarle nuestros problemas y pedirle que nos ayude. Si hacemos nuestra parte, podemos estar seguros de que nuestro amigo San Martín hará su parte.

Oración: Señor Jesucristo, que inflamó el corazón de San Martín con un ardiente amor a los pobres y que le enseñó la sabiduría de entregarse siempre a la santa voluntad de Dios, haz que, como él, seamos siempre verdaderamente humildes de corazón y llenos de la caridad de Cristo por la humanidad doliente. Amén.

Comentarios